Nuestras libertades
La fe y la práctica de la Iglesia Metodista Libre (FMC) se basan en la idea de que, a través de nuestra interacción con el Espíritu de Dios, aprendemos a amar a las personas de la misma manera que Dios nos ama. Cuando empezamos a ver a las personas a través de los ojos de Dios, ya no podemos aceptar la injusticia, el prejuicio y la esclavitud como algo normal. No podemos evitar el deseo de ver a todas las personas vivir en libertad.
Las cinco libertades
Si bien la Iglesia Metodista Libre ha adoptado muchas libertades y las ha considerado vitales para la expresión del amor de Dios, actualmente consideramos que estas cinco son fundamentales para nuestro llamado...
Libertad para todas las razas para adorar y vivir juntas.
La Iglesia Metodista Libre (FMC) fue y es abolicionista. Trabajamos por la libertad de los esclavos en 1860 y participamos en el movimiento por los derechos civiles de la década de 1960. Formamos grupos abolicionistas para liberar a los esclavos en nuestra propia nación y hemos creado un movimiento abolicionista hoy para liberar a los esclavos en todo el mundo.
Libertad de las mujeres para participar plenamente en la vida, el ministerio y el gobierno de la iglesia tal como las ha llamado y dotado Dios.
La Iglesia Metodista Unida ordena a mujeres para servir en la iglesia y enseña la igualdad en los matrimonios. En armonía con una larga tradición de igualdad de oportunidades para que las mujeres sirvan en la iglesia, desde los días en que la iglesia primitiva se reunía en las casas hasta el reconocimiento actual de que Dios llama y dota a mujeres y hombres para servir en Su iglesia, afirmamos el llamado de Dios y equipamos a los líderes de Dios para servir.
Libertad de los pobres a ser tratados con dignidad en la Iglesia y en el mundo.
La Iglesia Metodista Unida puso fin a la práctica de exigir a los pobres que se sentaran en los “bancos libres” en la parte posterior del santuario y convirtió todos los bancos en “libres”. Este compromiso de dejar las distinciones y los prejuicios socioeconómicos fuera del santuario e invitar a todas las personas a una verdadera comunión y aceptación es un compromiso permanente de nuestra iglesia.
Libertad de los laicos para recibir autoridad y puestos de decisión dentro de la Iglesia.
La FMC puso fin al dominio del clero sobre la iglesia y abrió una asociación sólida entre el clero y los laicos para trabajar juntos en la obra de Dios. Esta elevación de los laicos para que utilicen sus dones espirituales junto con los dones pastorales enriquece todos los aspectos de la vida en la iglesia y protege contra el abuso institucional.
Libertad del Espíritu Santo en la adoración.
La Iglesia Metodista Libre da libertad a cada congregación local para seguir la guía del Espíritu en cuanto a cómo adorar. Algunas Iglesias Metodistas Libres adoran en estilo litúrgico, mientras que otras adoran en estilo carismático con música de adoración contemporánea y emocionante. Unas pocas han tomado esta libertad para crear un estilo combinado de adoración que reúne a una comunidad de personas de todas las edades y crea una familia de Dios que acepta tanto la liturgia sacramental como el año cristiano, así como la música de adoración y los servicios de oración más recientes. Es vital recordar que la adoración incluye no solo la música de alabanza y el estudio de las Escrituras, sino también el compartir la vida en comunidad.
Continuar el viaje
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